Un fuerte retroceso en el financiamiento educativo que afecta las becas estudiantiles y la reparación de la deteriorada infraestructura de escuelas y colegios; ausencia de información sobre el sustento de la llamada Ruta de la Educación; inacción para resolver la ausencia de conectividad de los estudiantes y falta de claridad en el soporte técnico de los cambios que se impulsan en la evaluación estudiantil.

Así de sombrío es el panorama de la educación costarricense que describió a LadoB la Coordinadora del Estado de la Educación, Isabel Roman.

Esta investigadora especialista en educación señala que, tras la pandemia, la brecha digital de estudiantes y profesores se mantiene, que tampoco se avanzó en capacitar a los docentes y recomienda que el país  formalice un acuerdo nacional sobre la educación basado en el diálogo.

Este es un fragmento de la entrevista que sostuvimos.

¿Cuáles podrían ser, técnicamente, tres prioridades del MEP para comenzar a salir del apagón educativo. 

Bueno, sin lugar a dudas el tema de la evaluación es un tema muy importante, pero hay que hacerlo bien, ¿no? La evaluación no es solamente un tema de pruebas, hay que generar un sistema, construir un sistema.  Las buenas prácticas internacionales te dicen que los países que más rápidamente pudieron reaccionar frente a la pandemia eran países que tenían organizados sistemas de evaluación robustos. Y cuando digo robustos es con un conjunto de componentes y articulados. La evaluación no solamente evaluar a los estudiantes, es también evaluar a los docentes, es evaluar a los centros educativos. Es algo muchísimo más integral. Está compuesto por temas con un componente técnico muy fuerte, porque crear instrumentos de medición para medición de habilidades y competencias se las trae. Hay que tener mucho cuidado de la construcción para garantizar la confiabilidad y la validez de los estudiantes y de la y de la información.

Y el otro tema  importante es la devolución de la evaluación, porque la evaluación no se hace por sí misma, se hace para obtener información que nos permita tomar decisiones. 

También nos parece que es muy importante el tema de la conectividad, o sea, en esto sei nos vuelve a sacar otra pandemia, estamos exactamente en el mismo punto.

Otro elemento quea nosotros nos parece fundamental, es la capacitación de los docentes. Aquí hay un nudo gordiano, diría yo, porque en este momento y por distintas razones, los docentes no pueden ser sacados de su jornada laboral para nada y esto que es una medida que busca que el docente esté en lo que tiene que estar,  también a veces es un poco extremo en el sentido de que ni siquiera para capacitación. 

Entonces la oferta de capacitación que debería ser obligatoria en esa jornada laboral de los docentes no la tenemos en este momento y todo lo que ganamos en los aprendizajes que los docentes y los directores de los centros educativos hicieron en un conjunto de habilidades, por ejemplo, las competencias digitales, no las estamos ofreciendo y pretender que esto se va a resolver de una manera autodidacta con un montón de plataformas de aquí y allá, sabemos que no resulta.  

Y obviamente el tema de los planes de nivelación y de recuperación. Y por eso es muy importante tener un documento técnico sobre la Ruta de la Educación, porque se necesita saber cuáles son los objetivos,  la planificación y los recursos que están disponibles, esto es fundamental. 

Pero en realidad, la prioridad es el tema de la inversión en educación. Es un tema que nos preocupa montones, porque realmente vamos en la dirección contraria. Ha habido una reducción en el marco de todo lo que tiene que ver con la aplicación de la regla fiscal, ha habido realmente un impacto muy, muy fuerte en el tema de la inversión en educación.

¿Cuánto se ha reducido la inversión en educación?.

En este momento estamos en menos del 6% del PIB y esto es muy grave,  aquí sí que tenemos retrocesos. El tema de la inversión en educación es un piso mínimo.  Lo peor que nos puede pasar como país es que no salgamos a defender la inversión en educación como un todo, como un mandato constitucional, porque este país tiene el mandato constitucional de invertir el 8 % del PIB en educación y esto que, claramente es una política de Estado, no se está cumpliendo

¿Que significa eso? Que deberían estar las máximas autoridades del Ministerio defendiendo la inversión en educación. Porque lo peor que nos puede pasar es empezar en una equivocada discusión de que es mejor que pasemos plata a este nivel de la educación y a este otro, porque este es  más importante y el otro no. 

Incluso recomendaciones como decir quitemos a las universidades e invirtamos más en los primeros niveles, no, todos los niveles son importantes,  

Es una discusión muy vieja de los años 90, me acuerdo que el Banco Mundial recomendaba a los países reducir la inversión en la educación superior para pasársela a los primeros niveles. Y esta fue una política que, en el caso de África, fue terrible porque le quitó a África la posibilidad de desarrollo en la educación superior y le quitó 20 años de desarrollo. 

¿Cómo ve las señales que se envían desde el MEP? Se ha criticado que se habla de la Ruta de la educación, pero no se aterriza exactamente en qué consiste y con qué bases técnicas.

Bueno, en este momento prefiero emitir criterio hasta que tenga un documento al frente. Porque, como decía alguien por ahí, el pensamiento científico requiere tiempo y precisión, si no se convierte en una simple opinión.  Ciertamente creo que en este momento es la solicitud que más se le hace al ministerio, los sectores quieren saber los parámetros, las metas, los recursos de los que se dispone. Porque yo puedo decir un objetivo, pero, con este margen de recursos tan restringido ¿Cuál es la posibilidad de alcanzarlo? 

¿Cómo se va a llegar a ese objetivo con la plata que tenemos?

Con la plata que tenemos son muy difíciles una serie de cosas y temas estratégicos por ejemplo, el tema de las becas para los estudiantes, uno de los grandes logros que habíamos tenido cuando el país empezó a aumentar la inversión en educación, fue fortalecer los incentivos para estudiar. Eso fue muy importante porque nos permitió reducir los niveles de exclusión que teníamos allá por los años 90 o 2000  y que veníamos logrando reducir. 

Si eso se nos cae en un contexto en este donde aumenta significativamente el número de hogares en pobreza, estamos en problemas.  Estamos en problemas porque el riesgo de exclusión obviamente se incrementa. Las familias ven como un alto costo de oportunidad enviar a sus hijos a la escuela y mejor lo sacan a trabajar. 

¿El recorte está afectando becas y qué otras áreas? 

En general todo el tema de las inversiones que se pueden hacer, obviamente todo el tema de infraestructura, todo lo que tiene que ver con bienes de capital.  

 Hoy el panorama de la educación es preocupante

Hay una serie de metas que están planteadas para el 2024, es que lo que logramos escuchar en la presentación es que se hizo de la Ruta de la educación, pues lo que tenemos, es solo un PowerPoint. Y muchos de los objetivos que se plantean están para lograrse en el 2024.

El gran tema es ¿qué pasó con el 2023? La verdad ya se nos fue otro año y no podíamos darnos ese lujo, no podíamos darnos el lujo de que en el 2023 pues no hiciéramos las cosas. Un año en el que debimos haber hecho más cosas sustantivas de apoyo a los docentes y a los estudiantes para empezar a sentar las bases de salida del apagón educativo. Vamos a tener que tener una reflexión más profunda sobre la importancia que esta sociedad le otorga al tema de la educación. Necesitamos un acuerdo nacional sobre educación y mucho diálogo, pero parece que a veces el diálogo no está a la orden del día en el nuevo contexto, necesitamos hablar todos los sectores son importantes y son necesarios. No se puede excluir a ningún sector, Más bien aquí todos tienen que sumar, ese es el gran desafío. 

En el contrato social costarricense, ¿Qué lugar le estamos dando al tema de la educación? ¿Estamos realmente colocándola en un lugar fundamental? O estamos volviendo a andar un camino de reducción fuerte en la inversión en educación… deberíamos estar empeñados en un esfuerzo sostenible de garantizar una sostenida y creciente inversión en educación y que esa inversión realmente nos lleve a lo que todos andamos buscando, que es que los niños, niñas y adolescentes, tengan acceso a una educación equitativa y de calidad.

Acá podes ver la entrevista completa: